19 de agosto de 2008
Por extraño que parezca, nunca tuve la sensación de estar bajo vigilancia en ninguna de mis excursiones.
Éste iba a ser diferente...
Nuestro querido amigo el Dr. P. de Uganda nos visitó durante unos días en julio. Habíamos estado viajando con él durante nuestra visita a Uganda en 2003 y nos mantuvimos en contacto desde entonces.
Construyó el primer CB de orgonita en Uganda y utilizó con éxito zappers en un entorno hospitalario.
Habíamos visitado brevemente Pretoria antes y DrP había detectado varios lugares donde sospechaba que había algún tipo de bases subterráneas.
Así que un día unimos fuerzas con Fungai para intentar eliminar algunos de estos lugares.
Hace unos años había realizado una redada general en Pretoria, pero ahora estaba convencido de que sería conveniente hacer algo más ahora.
En el momento de mi primera redada en Pretoria (debe haber sido 2002/2003) había recibido varios indicios de vastas bases subterráneas, a menudo conectadas con bases de la fuerza aérea en el área.
Esta vez, sin embargo, queríamos "vagar sin rumbo" y seguir principalmente las corazonadas intuitivas del Dr. P.
Cuando conduje con él hasta Pretoria desde Johannesburgo por primera vez para encontrarme con Fungai y algunos de sus amigos zimbabuenses, había percibido varios puntos que parecían pedir a gritos atención a nuestra derecha. (Al este de la autopista Ben Schoeman)
Cuando reservamos un día entero para reventar Pretoria nuevamente, comenzamos con el gigantesco Mástil cerca de UNISA. Ese estaba rodeado con unos 20 TB y varios Earthpipes. Seguramente había sido mucho más tacaño con mi munición en aquellos primeros días.
Torre Telkom cerca de UNISA
Desde allí vagamos sin rumbo (es decir, guiados principalmente por la intuición del Dr. P) a través de los suburbios de Pretoria, básicamente de torre en torre hasta que nos encontramos pasando del extremadamente rico suburbio de Waterkloof a la cresta de Waterkloof.
Cuando salimos del suburbio, el último recinto por el que pasamos resultó ser la "Academia del Servicio Secreto", ¡una escuela de espías! Seguramente martillamos 2 tubos de tierra a lo largo de la valla larga.
Toda la cresta parecía hervir con una energía muy extraña y eso llevó al Dr. P. a suponer que podría tratarse simplemente de una gran colmena subterránea.
Torre en Waterkloof Ridge
Con vistas a la cresta
Curiosamente ahora, cada vez que nos deteníamos definitivamente nos sentíamos observados. Un Audi A4 blanco nos pasó y se detuvo a unos 100 metros detrás de nosotros mientras estábamos martillando. Luego otro.
De hecho, la mayor parte del tiempo había un Audi blanco detrás y delante de nosotros. ¿Es ese el coche espía estándar que utilizan en la academia del servicio secreto?
Dado que hasta ahora he experimentado muy poco en materia de vigilancia abierta en el sur de África, esto fue nuevo y emocionante.
Uno de los muchos Audi A4 blancos
DrP lo golpea cerca de la puerta
G haciendo trabajo de campo en Waterkloof Ridge
Aún más extraño se volvió cuando nos detuvimos de nuevo y una furgoneta de la policía se acercó a nosotros. No era un patrullaje de rutina como luego confirmaríamos porque regresaban al lugar de donde habían venido y no seguían en la misma dirección. Los habían enviado a revisarnos. Órdenes superiores.
Afortunadamente, el Dr. P tiene una mente muy proactiva y desafió a los 2 policías a muchas bromas humorísticas, quitándoles todo el entusiasmo.
Un genio comunicativo, debo decir.
Fungai, igualmente alerta, se escabulló para captar toda la escena con la cámara.
Coche de policía enviado para controlarnos.
El encanto y el buen humor pueden ser un arma ofensiva
Pero la rareza no iba a terminar pronto. Habíamos llegado (por "deriva sin rumbo") muy cerca de Fort Klapperkop, uno de los 4 fuertes antiguos alrededor de Pretoria. La antigua compañera psíquica Caroline me había señalado el Fuerte Klapperkop como otra base subterránea alienígena. Lo reventamos entonces (hace 5 o 6 años) y ella informó que la actividad extraterrestre allí había muerto inmediatamente después de la colocación de los regalos.
Y, sin embargo, parecía extraño que volviéramos a terminar aquí.
Por supuesto, hoy en día Fort Klapperkop es un museo y se supone que es una excursión familiar inofensiva.
Sin embargo, la puerta estaba cerrada y el guardia insistió en contarnos un chiste muy largo. El chiste ERA realmente divertido, pero nos llevó unos 2 minutos contarlo, tiempo durante el cual no pudimos seguir adelante.
Tuve una extraña sensación de que estaban usando esta inmovilización forzada para escanearnos de alguna manera extraña.
También tuve una extraña sensación de que algo peligroso se acercaba por detrás. Pero, por supuesto, era invisible.
Guardián de la puerta de Fort Klapperkopp contando un chiste
DrP dentro del fuerte
Incluso los guardias ocasionales en medio del recinto del fuerte estaban inusualmente atentos y extraños, al igual que el hombre que vendía las entradas.
Usamos la misma "arma" que con la policía: charlar con ellos de manera proactiva.
Por supuesto, no se pensó en colocar tubos de tierra allí mismo, pero pudimos esconder algunas orgonitas estándar en buenos lugares.
2 tuberías de tierra también llegaron a lo largo del camino de entrada desde la puerta inferior hasta la superior.
Fungai haciendo un poco de juego de pies dentro del fuerte.
Mirando a Pretoria desde el Fuerte
Para colmo, el mismo guardia nos hizo otra broma (nuevamente 2 minutos de escaneo) cuando salimos.
Al salir pasamos por la Base de la Fuerza Aérea Waterkloof, otro sospechoso de actividad subterránea.
Ya lo habían regalado antes, por lo que solo era mantenimiento de rutina. 2 tuberías de tierra adicionales y algunos TB en lugares accesibles.
Base de la Fuerza Aérea Waterkloof
Antenas extrañas en los terrenos de la AFB
El compañero psíquico con el que viajé hace 6 años identificó estas extrañas antenas de espina de pescado como material extraterrestre. Sea lo que sea, digo "in dubio busto" y, en caso de duda, rómpelo.
Unos últimos clavos en el ataúd de los representantes locales del ocultista Nuevo Orden Mundial fueron clavados en la Reserva Natural Groenkloof y sus alrededores, aparentemente otra cresta montañosa algo hueca.
Cuando estuve en Pretoria con Caroline, ella me alertó sobre el hecho de que todos los Koppies (Buttes) no construidos eran bases subterráneas en Pretoria y se mantenían libres de habitaciones humanas por esa misma razón. Por supuesto, todo el episodio podría descartarse como producto de nuestra fantasía hiperactiva. Pero nunca me había sentido tan vigilado durante varias horas y no creo que haya sido una operación humana en absoluto.
Quién o lo que sea que puebla estas "bases clandestinas" debe haber estado muy molesto por nuestra presencia e instigado toda esta abierta actividad humana. Caroline habló de una colmena en aquel entonces y la energía se sentía como estar cerca de una colmena.
Agradezco a mis dos compañeros intuitivos por su maravilloso estado de alerta y su rápida y silenciosa coordinación de acciones.
Esto fue realmente divertido.